Esta zona reproduce a la prefección el habitat del Colacuerno Húngaro.
El Colacuerno Húngaro es el más peligroso de todos los dragones. Su cuerpo tiene escamas de color negro y aspecto de lagarto, sus ojos son de color amarillo y de su cola surgen cuernos. Posee una de la llamas de dragón más largas: de unos 15 metros o más. Sus huevos son de color cemento y su cáscara es dura. Sus crías nacen rompiendo el cascarón con su cola, ya que nacen con los cuernos desarrollados. Sus comidas preferidas son las cabras, ovejas y humanos.